Preguntas frecuentes

Sí. El servidor estará accesible desde Internet, por lo que necesitará una conexión de banda ancha para poder trabajar.

No necesariamente. Dependiendo de la aplicación contratada dispondrá de un programa cliente para instalar en su equipo, que establece comunicación con el servidor, o bien deberá trabajar con el navegador web. Solicítenos información sobre el producto deseado para indicarle el modo de trabajo.

Completamente. Los proveedores de hosting o Datacenters están fuertemente regulados y tienen elevados sistemas de seguridad física (vigilancia, sensores de movimiento, control de accesos, sistemas de detección contra incendios, …) y digital (encriptación de la información, antivirus ,firewalls, …). Además, sólo usted tendrá acceso a su información.

Por supuesto. De forma automática y periódica se realizan copias de seguridad de su información. En cualquier momento puede acceder a su zona y descargar dicha copia.

La modalidad “SaaS dedicado”, como su nombre indica, implica que se le dedican recursos de forma exclusiva. Esto se traduce en que podemos adaptar la aplicación para cubrir procesos específicos de su empresa. En la modalidad “SaaS” los recursos son compartidos por varias empresas y la aplicación es estándar, sin posibilidad de adaptarse.

Sí. No obstante, si cambia de modalidad “SaaS dedicado” a “SaaS” no podrá disponer de las adaptaciones que tuviera anteriormente.

Sí. Llegado el momento podrá realizar el cambio de modalidad.

El software libre es aquel software con un modo de licenciamiento que permite la libre distribución y entrega del código fuente de la aplicación al cliente final.

La diferencia entre software libre y software propietario es, únicamente, su licencia de uso. Comparar software libre con software propietario es un error de raíz. La característica “libre” del software puede ser adoptada por cualquier empresa que crea que esa estrategia le otorga una ventaja competitiva a su producto.

Los conceptos de software libre y software de código abierto no son nociones relativas a una tecnología determinada, marca o producto, sino que expresan una característica jurídica.
Por tanto que una aplicación sea mejor que otra no tiene relación directa con su licencia, si no con aspectos puramente técnicos y funcionales.

Porque es el modelo clásico de negocio. Actualmente el cambio de licencia resulta impensable para muchos distribuidores que ya cuentan con un producto privativo bien posicionado en el mercado, pues supondría: perder los ingresos proporcionados por la venta de licencias, tener que mejorar tanto la calidad del código como los servicios en torno a su producto; y lo más importante, perder el monopolio de la distribución. Es decir, el control sobre su propio desarrollo.

El modelo de desarrollo de software libre ha permitido un notable distanciamiento tecnológico sobre sus competidores propietarios. Generando un modelo de negocio alrededor de la venta de servicios sobre el software, y no vendiendo el software en sí mismo, se consigue que este último sea mejorado de manera constante y continua, y cuando no existe la necesidad de preocuparse por empaquetarlo y venderlo como una nueva versión, se termina logrando una mayor calidad técnica.
A todas estas ventajas hay que añadir que para el cliente supone un gran ahorro en coste de licencias.

El modelo de negocio se centra en la prestación de servicios sobre el software tales como la consultoría, implantación, formación, parametrización, adaptación, etc.